¡Uy, sí, la cena!

Sí, es verdad, con el tema del post anterior, no dije nada acerca del evento que se había realizado no muchas horas antes: la "Cena de Corolarios II".Claro, con tanta demora, me ganaron de mano en la publicación de la nota. Y un poco por vago, pero principalmente porque es una crónica excelente, los voy a derivar directamente al post referido al tema que escribió en su nuevo blog el Cello BruTzo. Quien no sólo se mantuvo lo suficientemente sobrio como para recordar hasta el último detalle de lo acontecido, sino que encima amenizó la reunión con un cargamento de anécdotas sobre el mundillo coral (si se le diera por hacer un programa de chimentos sobre esto, vamos todos presos), sacó las fotos, me las mandó... en fin, sólo le faltó pagar la cuenta.

Hablando de la cuenta, el único detalle que el Cello no mencionó (tal vez para no mandarme en cana) fue mi altercado con el mozo que nos atendía, sobre el final de la velada. Claro, el tipo de repente se aparece con la cuenta, diciendo "Chicos, ya cerramos, ¿me pagan?". Yo, que como todos notaron no estaba en uno de mis mejores días (tal vez previendo lo que se avecinaba a la mañana siguiente), y encima justo estaba por pedirme el último café, le dije que ok, pero que me trajera el dichoso café. Y el tipo empecinado que no, que ya había cerrado la caja.
No es el primer altercado que tengo con los mozos de Margot, por razones parecidas. Mi sugerencia, para evitar este tipo de disputas, es venir unos minutos antes, y preguntar "chicos, estamos cerrando, ¿se van a servir algo más?". Y hasta capaz que se ligan una mejor propina, amén de lo que siempre deja la última ronda.

Ah, y eso que dice el Cello acerca de que lo eyecté del Tenoriomóvil en movimiento, es una falacia. Lo dejé un poco lejos de la vereda (un par de metros, para ser más exactos), pero que frené, frené.

Dicen que dicen, la "Cena de Corolarios III" va a ser en la casa de alguno de los asistentes a la del viernes pasado (no diré cuál). Por lo cual, el mecanismo para participar será levemente distinto. Pero les adelanto que va a ser antes de lo que todos se imaginan.
Ya estoy preparando gástricamente para ese día,
Johann