Sólo para una élite
Tarde pero seguro, les cuento más o menos cómo viví el concierto del Coro de Cámara Zahir del domingo en el Auditorio San Rafael.
La verdad que cuando uno llega al lugar dice "uaaaaaaaaa", porque realmente es muy bonito. Y la acústica, al menos para el público que escucha, es realmente excelente. Tuve oportunidad de comprobarlo personalmente porque, como verán, en una de las obras me tocó integrar el típico "cuarteto eco" que se instala al fondo de la sala.
Lástima que durante la prueba de sala tuvimos que dejar de lado una de las obras programadas, la "Canción 31" de Fernando Moruja, porque la realidad es que... no nos salía ni a tiros.
Pero lo más triste vino cuando estábamos por comenzar a cantar y, espiando por entre los cortinados, llegamos a la conclusión de que íbamos a ser casi la misma cantidad de gente arriba y abajo del escenario. Sí, se ve que el precio de las entradas resultó demasiado alto para estos tiempos que corren. Por suerte, la aristocrática concurrencia estuvo realmente muy cálida y nos respondió más que bien. Desde esta humilde página les agradezco no sólo que hayan ido, sino que nos hayan brindado tanto afecto.
Sobre el concierto en sí no puedo decir mucho. Algunas obras salieron muy lindas y otras no tanto. Por ejemplo, quienes estuvieron allí tuvieron la oportunidad de escucharme desafinar como un cuervo durante el solo de la obra "Amor Luminoso", compuesta por nuestro querido director Diego Boero. Debo alegar en mi defensa que el mencionado solo es en realidad para un barítono y encima se venía calando notoriamente, así que en esas profundidades me costaba distinguir si el que cantaba era yo o si estaba pasando el subte por abajo del escenario.
Hubo, por supuesto, algunos momentos altos. El "Zefiro Torna" de Monteverdi nos viene saliendo bastante lindo, lo mismo que "Por el campo la lleva...", de Emilio Dublanc. Y sin duda el momento más emotivo, como siempre, fue cuando cantamos las obras de Fefe Moruja que sí pudimos hacer: "O bone Jesu - Lux Aeterna" y "Miedo", esta última en su debut dentro del repertorio de Zahir. La obra es bellísima y debo decir que nos salió bastante decente, y el inmenso aplauso del público casi nos hace largar los mocos en medio del escenario.
Y le tengo que pedir mis más sinceras disculpas a quienes nos pidieron bises luego de la última obra, el "Epithalame" de Daniel Lesur, y se fueron con las manos vacías. La verdad es que no teníamos más obras en el repertorio, y nos dio un poco de vergüenza repetir alguna de las ya interpretadas.
Mi conclusión es que, al menos desde adentro, fue un concierto muy disfrutable, y quiero aprovechar esta oportunidad para invitarlos al del próximo domingo 13/11, a las 20:45 hs., en la Basílica San Antonio de Padua, av. Lincoln 3701, Capital. Esta vez la entrada no será tan onerosa: apenas un humilde alimento no perecedero. ¿Quién no tiene en la alacena un paquete de fideos que le sobre?
Además, va a ser nuestro último concierto del año, así que les garantizo que vamos a dejar el alma en escena. Acá al ladito verán la gacetilla.
Los espero, eh, no me fallen...
Johann
La verdad que cuando uno llega al lugar dice "uaaaaaaaaa", porque realmente es muy bonito. Y la acústica, al menos para el público que escucha, es realmente excelente. Tuve oportunidad de comprobarlo personalmente porque, como verán, en una de las obras me tocó integrar el típico "cuarteto eco" que se instala al fondo de la sala.
Lástima que durante la prueba de sala tuvimos que dejar de lado una de las obras programadas, la "Canción 31" de Fernando Moruja, porque la realidad es que... no nos salía ni a tiros.
Pero lo más triste vino cuando estábamos por comenzar a cantar y, espiando por entre los cortinados, llegamos a la conclusión de que íbamos a ser casi la misma cantidad de gente arriba y abajo del escenario. Sí, se ve que el precio de las entradas resultó demasiado alto para estos tiempos que corren. Por suerte, la aristocrática concurrencia estuvo realmente muy cálida y nos respondió más que bien. Desde esta humilde página les agradezco no sólo que hayan ido, sino que nos hayan brindado tanto afecto.
Sobre el concierto en sí no puedo decir mucho. Algunas obras salieron muy lindas y otras no tanto. Por ejemplo, quienes estuvieron allí tuvieron la oportunidad de escucharme desafinar como un cuervo durante el solo de la obra "Amor Luminoso", compuesta por nuestro querido director Diego Boero. Debo alegar en mi defensa que el mencionado solo es en realidad para un barítono y encima se venía calando notoriamente, así que en esas profundidades me costaba distinguir si el que cantaba era yo o si estaba pasando el subte por abajo del escenario.
Hubo, por supuesto, algunos momentos altos. El "Zefiro Torna" de Monteverdi nos viene saliendo bastante lindo, lo mismo que "Por el campo la lleva...", de Emilio Dublanc. Y sin duda el momento más emotivo, como siempre, fue cuando cantamos las obras de Fefe Moruja que sí pudimos hacer: "O bone Jesu - Lux Aeterna" y "Miedo", esta última en su debut dentro del repertorio de Zahir. La obra es bellísima y debo decir que nos salió bastante decente, y el inmenso aplauso del público casi nos hace largar los mocos en medio del escenario.
Y le tengo que pedir mis más sinceras disculpas a quienes nos pidieron bises luego de la última obra, el "Epithalame" de Daniel Lesur, y se fueron con las manos vacías. La verdad es que no teníamos más obras en el repertorio, y nos dio un poco de vergüenza repetir alguna de las ya interpretadas.
Mi conclusión es que, al menos desde adentro, fue un concierto muy disfrutable, y quiero aprovechar esta oportunidad para invitarlos al del próximo domingo 13/11, a las 20:45 hs., en la Basílica San Antonio de Padua, av. Lincoln 3701, Capital. Esta vez la entrada no será tan onerosa: apenas un humilde alimento no perecedero. ¿Quién no tiene en la alacena un paquete de fideos que le sobre?
Además, va a ser nuestro último concierto del año, así que les garantizo que vamos a dejar el alma en escena. Acá al ladito verán la gacetilla.
Los espero, eh, no me fallen...
Johann
5 Comentarios:
Despues de lo que contas de la poca cantidad de audiencia lamento triplemente no haber ido, porque es un placer escuchar a Zahir y un placer ver trabajar a Diego, y me disculpo desde ya por mi futura ausencia para este domingo, pero tengo un ensayo general en Lanús con posterior concierto de fogueo, o sea... no llego ni a ganchos.
Con respecto a lo del jueves... si queres obsequiote una entrada si es que podes ir.
Un abrazo
Marcelo
Otra cosita, ahora que veo bien las fotitos, Gerardo Müller sigue en Zahir, que bien, cuando no lo vi la ultima vez crei que se habia tomado el buque.
Los asientos del Auditorio San Rafael son de madera???!!! Eso parece en la foto, por lo menos.
Saludos. Rita
Sip, son de madera, por eso si uno anda con algun dolor lumbar recomiendo llevar algun almohadoncito para la espalda.
Saludos
Marcelo
Tal como dice Marcelo, son unas butacas de madera preciosas, como todo el resto del auditorio.
Eso sí, no tuve la oportunidad de comprobar su comodidad, ya que todo el tiempo que estuve ahí anduve caminando o cantando. Así que recién pude darle un punto de apoyo a mi... ehmm... región lumbar, cuando me subí al auto para volver.
Un abrazo,
Johann
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