¿Agrandado? No, es que se me achicaron los zapatos...
Como ha pasado que hubo quienes se han sentido molestos por haber comentado conciertos propios como si fueran ajenos, esta vez sólo voy a mencionar que ayer a la nochecita, el otro coro que integro, el Coro de Cámara Zahir, se presentó en el Templo Evangélico del Rio de la Plata, a apenas unos metros del coqueto barrio de Belgrano "R". Ocasión que aproveché para estrenar mi chiche nuevo, y en este post les dejo un par de muestritas de lo que será el futuro de "Coro Lario": testimonios gráficos de los conciertos a los que asista.
El concierto, como creo haber mencionado, formó parte del amplio espectro de conciertos corales que propone ADICORA para los fines de semana en B.A., y se llevó a cabo en una sala colmada de público. Algo no demasiado meritorio, ya que el auditorio contaría apenas con unas 80 sillas, pero bueno, les cuento que había un par de personas paradas (lo nos da un total de 82 personas, si mi ábaco aún funciona bien). Lo que sí, tengo que mencionar que entre el público había algunas conspicuas personalidades: los directores Gustavo Giménez (organizador) y Martín Santoro, y el multifacético director-cantante-webmaster Marcelo G. Bruzzo, con quien ¡por fin! tuve el gusto de estrechar la mano. Verán por allí una prueba tangible de su presencia en el concierto.
Y musicalmente hablando, como ya he dicho, no haré comentarios de nuestra interpretación, salvo por el hecho de que creo que fue un buen concierto dentro de las posibilidades de Zahir. No hubo pifies notorios y no noté ninguna calatura ni desafinación destacable (y miren que tengo orejitas bastante sensibles, eh). El detalle más saliente de nuestra actuación fue el más que emotivo reingreso de "O bone Jesu / Lux Aeterna", de Fernando Moruja, a nuestro repertorio. Debo aclarar que Diego Boero, nuestro director, era amigo íntimo de Fernando, y tuvimos el honor de contarlo como asistente a varios de nuestro conciertos. Es más, creo que somos el único coro autorizado expresamente por Fefe a subir medio tono el "O bone Jesu", para poder hacer las dos obras juntas y en la misma tonalidad.
De más está decir que el coro las cantó con un nudo en la garganta.
Y discúlpenme, pero no puedo dejar de decir que Zahir está sonando, a mi entender, realmente lindo. No seremos el GCC ni el Estudio Coral, pero creo que vamos por el buen camino, y me encantaría que ustedes vengan a alguno de nuestros próximos conciertos (serán todos en Capital), para ver si lo que digo es cierto o estoy viviendo en una nube de ensueños.
Ah, y casi me olvido de mencionar que entre el público estuvo Nere Arceo, integrante del GCC, ex directora del GCC de niños y ex integrante de Zahir, quien me vino a felicitar por el concierto, diciéndome que le encantó escuchar el progreso del coro, al cual ella conoce desde hace varios años. Gracias, Nere, tu opinión es para mí, como integrante de Zahir, más que estimulante.
Sí, ya sé, me van a decir que soy un agrandado, y seguramente van a tener razón.
Pero igual, por favor, no se enojen...
Johann
El concierto, como creo haber mencionado, formó parte del amplio espectro de conciertos corales que propone ADICORA para los fines de semana en B.A., y se llevó a cabo en una sala colmada de público. Algo no demasiado meritorio, ya que el auditorio contaría apenas con unas 80 sillas, pero bueno, les cuento que había un par de personas paradas (lo nos da un total de 82 personas, si mi ábaco aún funciona bien). Lo que sí, tengo que mencionar que entre el público había algunas conspicuas personalidades: los directores Gustavo Giménez (organizador) y Martín Santoro, y el multifacético director-cantante-webmaster Marcelo G. Bruzzo, con quien ¡por fin! tuve el gusto de estrechar la mano. Verán por allí una prueba tangible de su presencia en el concierto.
Y musicalmente hablando, como ya he dicho, no haré comentarios de nuestra interpretación, salvo por el hecho de que creo que fue un buen concierto dentro de las posibilidades de Zahir. No hubo pifies notorios y no noté ninguna calatura ni desafinación destacable (y miren que tengo orejitas bastante sensibles, eh). El detalle más saliente de nuestra actuación fue el más que emotivo reingreso de "O bone Jesu / Lux Aeterna", de Fernando Moruja, a nuestro repertorio. Debo aclarar que Diego Boero, nuestro director, era amigo íntimo de Fernando, y tuvimos el honor de contarlo como asistente a varios de nuestro conciertos. Es más, creo que somos el único coro autorizado expresamente por Fefe a subir medio tono el "O bone Jesu", para poder hacer las dos obras juntas y en la misma tonalidad.
De más está decir que el coro las cantó con un nudo en la garganta.
Y discúlpenme, pero no puedo dejar de decir que Zahir está sonando, a mi entender, realmente lindo. No seremos el GCC ni el Estudio Coral, pero creo que vamos por el buen camino, y me encantaría que ustedes vengan a alguno de nuestros próximos conciertos (serán todos en Capital), para ver si lo que digo es cierto o estoy viviendo en una nube de ensueños.
Ah, y casi me olvido de mencionar que entre el público estuvo Nere Arceo, integrante del GCC, ex directora del GCC de niños y ex integrante de Zahir, quien me vino a felicitar por el concierto, diciéndome que le encantó escuchar el progreso del coro, al cual ella conoce desde hace varios años. Gracias, Nere, tu opinión es para mí, como integrante de Zahir, más que estimulante.
Sí, ya sé, me van a decir que soy un agrandado, y seguramente van a tener razón.
Pero igual, por favor, no se enojen...
Johann
1 Comentarios:
Fue un muy buen concierto, no, no hubo calaturas, bah digo yo...
Me encantaron las obras de: Monteverdi, Dublanc, Ligeti y Moruja.
Ojo que eso no quiere decir que lo demás no me gustó, fue un muy buen concierto sin altibajos, y no soy de crítica fácil.
Linda foto, lástima el gil que está al lado del Mtro. Diego Boero poniendo cara de feliz cumpleaños.
Salutti
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