El weblog de Johann Tenorio, Buenos Aires, Argentina
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sábado, julio 09, 2005

Una noche en la calle Corrientes

Acabo de llegar del Centro, más exactamente de la Iglesia Metodista de la avenida Corrientes, donde se presentaron el ex-Octeto Vocal 4 x 2 y el Coro de la Cátedra de Dirección Coral del Conservatorio Manuel de Falla (en adelante, el CCDCCMF). Y en este humilde post, mis queridos lectores, trataré de dejar asentadas mis impresiones del encuentro, al que acudí, como correspondía a la fecha patria, ataviado con una impecable escarapela.
Lo primero que debo decir es que me tiene absolutamente harto la gente que llega tarde a los conciertos, sobre todo en los encuentros de la Metodista que empiezan siempre puntuales, y mientras los cantantes están haciendo lo suyo, esta gente anda caminando por ahí, haciendo ruidos y buscando un lugarcito adonde sentarse. Sería bueno que la gente de la Metodista retome la saludable costumbre que tenía hasta hace un tiempo, de no dejar ingresar público mientras se ejecuta una obra, hasta el momento en que ésta termina. Si llegás tarde, bien podés aguantarte un par de minutos más para entrar.
Ahora sí, pasemos a la música.

Abrió el encuentro el 4 x 2, con varias novedades. Primero, esta presentación fue el debut de varios de sus integrantes: el guitarrista, el contrabajista, una soprano, un tenor y una "tenora", muy bonita ella. Con toda esta gente, el 4 x 2 ha dejado de ser un octeto: ahora son tres sopranos, dos contraltos, bajo, barítono, tenor, tenora, más tres instrumentistas y algún aporte vocal e instrumental de su director Claudio Tabbush,... ya son una banda.
Además, el 4 x 2 estrenó varios arreglos, la mayoría de Claudio Tabbush, aunque también metieron alguno de su hermano Vivian. Eso sí, siempre dentro de una misma temática, la música popular latinoamericana.
El grupo, al que ya comenté que había ido a ver en su primer concierto, obviamente ha crecido y mucho. Y si en algo se les nota, es en la alegría que transmiten desde el escenario. Dan la impresión de que están disfrutando en serio de lo que hacen, lo cual ayuda en parte para que el público también lo disfrute y se cree un clima muy especial. En ese sentido, si algo no los ayudó para nada fue... el lugar del concierto. La Iglesia Metodista es un lugar muy frío, tanto térmica como acústicamente, además de tener la característica de que desde cerca del escenario se escuchan todas las voces separadas, y desde lejos no se escucha nada. Y sinceramente, me dio mucha pena, ya que el grupo de por sí es muy cálido (casi diría que son el grupo ideal para el living de una casa), pero en ese ámbito, no se puede calentar el ambiente ni con un lanzallamas.
Particularmente, esto se notó mientras el grupo interpretaba uno de sus caballitos de batalla, una canción boliviana llamada "La Palomita". En un momento dado, alguien del público amagó con hacer palmas... pero se quedó en un solitario "plaf", que sonó casi hasta desubicado en ese ámbito glacial, y hasta allí llegó el intento. Lástima, tanto la canción como la interpretación bien se merecían algo de acompañamiento de parte de la gente.
Y ya que estoy en el tema "interpretación", quisiera mencionar algunos detalles técnicos acerca de la actuación del 4 x 2. El grupo me gustó y mucho, en parte por lo que ya dije sobre su desenfado escénico, pero además porque musicalmente suenan muy bien. Las voces son absolutamente "blancas", sin ningún tipo de impostación, pero aún así suenan perfectamente equilibradas. Y no detecté casi ninguna desafinación, lo cual en ese templo es decir mucho, ya que, como ya dije, la acústica es bastante ingrata. Obviamente, al estar acompañados de instrumentos, no hubo posibilidad de calaturas.
Con respecto a su repertorio, dentro de su temática es bastante entretenido. Tal vez podría sugerir, y esto no es una crítica sino más bien un pedido, que sería interesante escuchar al grupo haciendo arreglos algo más audaces, ya que por momentos sonaron un poquito "corales".
Y quisiera dejar el último párrafo para los debutantes: me llamó la atención la soltura con que se desenvolvieron, incluso en sus partes solistas. Felicitaciones, chicos.
En síntesis, el Vocal 4 x 2 es un grupo al que recomiendo seguir de cerca en su desarrollo, ya que en apenas un par de años llegaron a un nivel artístico envidiable. Yo sé que el mtro. Tabbush es un asiduo lector de estas páginas virtuales, y me gustaría que, de leer esta crónica, se la haga llegar a sus cantantes, porque una palmadita en la espalda nunca le viene mal a nadie. Ah, y de paso, maestro, dígale a la soprano que estaba a su extrema izquierda que estoy perdidamente enamorado de ella.

Seguidamente, paso a comentar la performance del CCDCCMF.
Este "coro" en realidad está formado por estudiantes de dirección coral, lo cual los redime de cualquier crítica acerca de su afinación y/o sentido rítmico. Todo el mundo sabe que los directores no saben cantar .

Ahora en serio, lo trascendente de esta actuación, en realidad, era la tarea de los estudiantes que dirigieron alternadamente al coro, bajo la atenta mirada del profesor Rodolfo Van der Meulen. Así que, durante el concierto, me dediqué principalmente a observarlos a ellos, mientras interpretaban diversos estilos, desde el insoportable "Chant des oyseaux" de Jannequin (disculpen, pero esta obra me provocó siempre una tremenda somnolencia) hasta el conocidísimo arreglo de Liliana Cangiano de "Como pájaros en el aire", de Peteco Carabajal.
Los chicos que dirigieron fueron 3 damas y 4 varones, y en general debo decir que estos útimos me gustaron un poco más, principalmente por una cuestión de soltura. Pero en general, todos estuvieron muy bien.
Por destacar a algunos, mencionaré a Jacqueline Kosinski (mostró mucha personalidad en "Christus factus est", de Bruckner), Santiago López (muy buen manejo de una obra difícil como "Dieu! qu'il la fait bon regarder" de Debussy), Omar Moreno (en una bella versión de "Como pájaros en el aire"), Mariano Rado (interpretó con mucha fuerza un clásico de Guastavino, "Pampamapa") y María Cristina Peralta (a pesar de que por momentos parecía estar bailando breakdance, abordó una fuga bastante compleja, el "Arroz con leche" de Guastavino, y en ningún momento se le fue de las manos).
Felicitaciones para ustedes también chicos. Eso sí, prepárense para un escenario más difícil que el de la Metodista: la jungla donde todos los nuevos directores combaten a muerte para conseguir coros que dirigir.

Como suelo decir en estos casos: no se enojen, es una opinión.
Que la pasen lindo,

Johann